domingo, 29 de julio de 2012

XXXV

¿Dónde se ocultan
los susurros aromáticos
del naranjo y el arroyo?

¿Qué ecos de risas frescas
rondan éstas paredes
desprovistas de escayola?

¿Por qué los tímidos rayos diurnos
revelan decrepitud y la noche es
luminiscencia de tu nombre?