jueves, 26 de julio de 2012

XXVII

Soy el último de los míos.
Tengo en mí la profecía.

No he dejado de amar
al zoo humano.

Llevo en mi ser encadenado
oráculos adversos:

"Audacia mortífera
les será asechanza nocturna,
serán heridos
por manos femeniles.

La esposa hará del esposo
vaina para la daga,
desentrañándole el aliento".